La Mallorca romana
Publicado el / por Productes de Mallorca / en Historia

La Mallorca romana

Han pasado más de 2000 años desde entonces. Pero ese fue el momento en que Mallorca hizo el avance en desarrollo más importante de su historia. Hablamos del año 123 a.C., cuando Roma  conquistó la isla. Realmente fue un antes y un después, pero… ¿Cómo era la Mallorca romana?

 

¿Cuándo y por qué llegaron los romanos?

Después de derrotar a los cartagineses, Roma se hizo con el control del Mediterráneo. Y lógicamente las Baleares eran un punto estratégico. Con el argumento de que nuestras islas servían de base para la piratería, el cónsul romano Quinto Cecilio Metelo invadió Mallorca en el año 123 a.C. y al cabo de menos de 2 años ya la tuvo totalmente bajo su dominio.

La Mallorca romana
denario de plata de Quinto Cecilio Metelo Pio

Cuando llegaron los romanos, aquí se vivía en poblados talayóticos. Esta forma de vivir les llamó la atención y a los talayots les llamaron “Tumuli”, porque les pareció que eran un amontonamiento de grandes piedras.

Los talayots
entrada poblado talayótico

Pero Roma estaba muchísimo más avanzada en todos los aspectos, también en su arquitectura y urbanismo. Así que decidieron fundar 2 ciudades modernas, una al norte “Pollentia” y otra al sur “Palmam”, lo que hoy son Pollensa y Palma. Además de éstas, también hubo otras 3, pero que ya no existen como tal: “Tucis”, “Guium” y “Bocchorum”.

Cómo era la Palmam romana

La típica ciudad romana tenía 2 calles principales, una en dirección de norte a sur (el “Cardo”) y otra en  dirección de este a oeste (el “Decumano”). El núcleo de la ciudad era el foro, que tenía templos, tribunales, y diversos órganos administrativos.

Lo más lógico es pensar que se inició como una fortaleza militar y que fue evolucionando a una ciudad, pero bastante pequeña comparada con la de ahora.  Se cree que en la “Palmam” romana el centro de la ciudad, el foro, estaba en la zona donde ahora está la Catedral. En lo que hoy es la avenida Antonio Maura había un puerto marítimo y algo más arriba, en las inmediaciones de la plaza Juan Carlos I / calle Pelaires, un anfiteatro. El Cardo y el Decumano serían respectivamente las actuales calle Sant Roc y Estudio General.

Y el casco de la ciudad, protegido por murallas con varias puertas de acceso, estaría constituido por diferentes tipos de viviendas: domus (casas unifamiliares) e insulae (edificios de pisos). Los límites de la ciudad serían más o menos así:

Oeste, por la calle Morei /  Este, por la Porta del Camp

Norte, calle convento de San Francisco / Sur,  desde calle Miramar hasta el Baluard del Príncep

Hoy en día quedan muy pocos partes visibles de la Palma romana, porque las distintas épocas de la historia han ido sepultándolo todo.

Pollentia

Seguramente se inició también como fortaleza militar y después llegó a ser una próspera ciudad. Los restos de lo que fue Pollentia están al norte de la isla, al lado de Alcudia y aún se pueden visitar, porque no fueron tapados por nuevas construcciones. Al parecer Pollentia tuvo gran actividad comercial, especialmente marítima y contando incluso con 2 puertos, uno en la bahía de Pollensa y otro en la bahía de Alcudia. Un gran incendio en el siglo III y los ataques de los vándalos en el siglo V llevaron poco a poco al declive de la ciudad.

La Mallorca romana
Pollentia

Actividad comercial

Tras ser conquistadas, la península ibérica y nuestras islas pasaron a ser una parte más de Roma. Pero una parte muy apreciada porque proveía de metales, productos agrarios e incluso esclavos a la urbe.

Los barcos romanos salían de Cádiz, Cartagena o Tarragona y seguramente muchos recalaban en Mallorca, un punto intermedio en las rutas comerciales entre Hispania y la península Itálica. De nuestra isla se llevaban principalmente vino, trigo, aceite y pescado. Y a su vuelta traían productos de lujo o exóticos del otro costado del Mediterráneo que estaba bajo dominio romano.

Y quizás lo que más supieron apreciar los romanos fue algo muy especial y casi exclusivo de nuestras islas: Los temibles honderos, mercenarios de primer nivel y que por dinero lucharon junto a las legiones romanas.

Hasta entonces los pobladores talayóticos de las Baleares no empleaban la moneda, pero poco a poco la romanización los acostumbró al uso de Denarios, Sestercios o Dupondios.

La Mallorca romana
reverso denario de plata Quinto Cecilio Metelo Pio

¿Que cambió Roma al llegar a Mallorca?   

Poco a poco, todo, pues el proceso de romanización fue imparable. Y aunque durante mucho tiempo muchos nativos siguieron viviendo en los poblados talayóticos, fueron perdiendo tierras y su modo tradicional de vida.

Roma fue de alguna manera una revolución, con un nuevo idioma (Latín), nuevas creencias, leyes, administración, urbanismo, arte, letras y ciencias. Y por supuesto nuevas técnicas de cultivo y ganadería y nuevas prácticas comerciales, con moneda tal como la conocemos hoy en día.

La cultura talayótica fue declinando y una nueva etapa comenzó, la Mallorca romana, que prácticamente duró casi 600  años.

 

Si quieres conocer algo sobre la conquista de la isla por los romanos, visita el artículo haciendo clic en el enlace siguiente: Conquista romana de Mallorca

Conquista romana de Mallorca

Tags: