Primer coche matriculado en España
Primer vehículo matriculado
El primer coche matriculado en España, el 31 de Octubre de 1900, se matriculó en Mallorca, obteniendo la placa PM-1. El vehículo era un cuadriciclo de la marca francesa Clément, que posteriormente dio origen a la marca británica Talbot.
Propietario
El coche era propiedad del mallorquín José Sureda Fuentes, un maquinista retirado de la Armada, residente en el barrio de Santa Catalina en Palma de Mallorca.
Otros le siguieron
Ese mismo año 1900 se matricularon otros tres coches en España: uno más en Mallorca, uno en Salamanca y otro en Cáceres.
La codificación de la matrícula en Baleares cambió en el año 1918 de PM (Palma de Mallorca) a BA (Baleares), pero debido a la confusión con la matrícula de Badajoz, volvió a la codificación original de PM algunos años más tarde. Cambiaría de nuevo, de PM a IB en 1997.
La creación del reglamento
Unos meses antes del primer coche matriculado en España, se había establecido la obligación del uso de matrículas con un reglamento. En Septiembre de 1900, se aprueba el “Reglamento para el Servicio de Coches Automóviles por Carretera”. Este reglamento, entre otras cosas, establecía la obligación de superar una inspección de Industria, y también la obligación del uso de matrículas.
No es que no hubiera coches antes, sino que antes de que se aprobara este reglamento los vehículos que circulaban no usaban matrícula. El peligro que suponía el uso de estos vehículos forzó a establecer unas normas de circulación, y la matriculación era la forma de identificar los vehículos y sus propietarios. Debido a que los usuarios lo tomaron como una medida fiscal, hubo reticencias a la matriculación, pero el tiempo fue haciendo su trabajo.
La foto de portada
La foto que ilustra este artículo es la original del PM-1 circulando por las calles de Palma. En aquella época las calles no estaban asfaltadas, siendo más adecuadas para el uso por carros tirados por caballos, mulas y otros animales de tiro. Si aciertas a verlo en la imagen, las posiciones de los asientos recuerdan mucho a esos carros.
En Mallorca, a esos vehículos con motor de explosión se les llamaba popularmente “carros de foc” o carros de fuego, haciendo una analogía con la expresión “carros de sang” o carros de sangre en referencia a los carros movidos por fuerza animal.
En Mallorca se construyó un automóvil en la década de los años 20 del siglo pasado. La famosa marca Loryc. Sigue el enlace y lo conocerás: Loryc un coche fabricado en Mallorca